La Santa Misa es una ceremonia sagrada en la que se celebra el sacramento de la Eucaristía. Su origen se remonta a los primeros tiempos de la Iglesia, cuando los apóstoles y discípulos se reunían para conmemorar la Resurrección de Cristo, estudiar las Escrituras y compartir el pan de la Eucaristía.
La Santa Misa es considerada como una reunión del Pueblo de Dios, en la que participamos activamente en la labor santificadora de la Iglesia y nos unimos a Jesucristo. Es, por tanto, el medio de santificación más perfecto, ya que nos permite conocer a Dios a través de la palabra y la comunión, y nos ayuda a fortalecer nuestra fe y relación con Él.